Hace 27 millones de años el supervolcán situado en la Caldera de la Garita entró en erupción.
La principal característica de los supervolcanes es que son planos y difíciles de detectar.
Sin duda, esta ha sido la mayor erupción volcánica jamás acontecida en la Tierra, pues la energía liberada cada segundo fue equivalente a 1000 bombas como la de Hiroshima.
Tal fue la magnitud del suceso que se liberaron 5000 km³ de material a la atmósfera, y cambió el clima de nuestro planeta considerablemente.
Murieron todos los seres vivos a 100 km a la redonda, y se acumularon 60 cm de ceniza, la cual se elevó hasta unos 50 km de altura.
Se formó un cráter tras la erupción, el de la Caldera de la Garita, situado en las Montañas de San Juan (Montañas Rocosas) de 75 Km de largo por 35 Km de ancho.
En la actualidad solo hay un supervolcán activo, el de Yellowstone, que si entrara en erupción pondría en serio peligro la existencia humana y produciría daños devastadores, además de un enfriamiento global a un nivel nunca visto.
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